A los amantes de la corneta y de los tríos de marchas de palio ya les costó dormir anoche. El III Congreso Nacional de Bandas Ciudad de Sevilla toma desde hoy las calles de la ciudad con un centenar de agrupaciones en una reunión sin precedentes en cuanto a número de participantes. ¿Su corazón? La Diputación.
Un centenar de bandas de las que solo 25 son sevillanas. Entre estas, destacan la banda del Sol, Virgen de los Reyes, Tres Caídas de Triana, Cigarreras, San Juan Evangelista o Encarnación de San Benito. Un gran festival para los amantes de la música con sabor a metales dorados y a viento madera.
Para este año se ha decidido que la Diputación, en Demetrio de los Ríos, es una buena sede que permitirá que los conciertos de música procesional sean en el patio al aire libre de la institución. Este edificio acogerá también la exposición de enseres e historia de las bandas participantes y una sala de vídeo en la que se proyectarán imágenes de las bandas en acción. El congreso se celebrará del 4 al 9 de diciembre y dará el pistoletazo de salida la Banda Municipal de Sevilla con un concierto el 4 en la Colegiata del Salvador.
Se realizarán ponencias sobre las Historia de la Música Procesional, La influencia militar en la Música de la Semana Santa, La Propiedad Intelectual, SGAE, entre otras aún por definir. El acceso al recinto será gratuito, colocando una taquilla solidaria donde podrán colaborar con 1 kg de alimentos no perecederos que irán destinados a la labor social que se realiza con los más necesitados. El dinero de las entradas de los conciertos, de carácter simbólico, irá para la Fundación Costaleros por un Cristo Vivo.
En cuanto al desfile, este año cambia su recorrido. Saldrá el día 8 de la Plaza Nueva y acabará su itinerario en los Jardines de Murillo. Para alcanzar este punto, las bandas participantes pasarán por Plaza de San Francisco, Hernando Colón, Alemanes, Placentines, Plaza Virgen de los Reyes, Mateos Gago, Fabiola, Santa María la Blanca, Cano y Cueto. Seis horas de desfile con fiesta final en Nervión y corazón en la Diputación para elevar las cornetas a los cielos.
R.N.
