Hace unos meses, Nervión contemplaba impotente cómo se producía la demolición de una hermosa casa adosada regionalista en la calle Alejandro Collantes. Ahora, mira con desolación cómo en Marqués del Nervión no queda piedra sobre piedra de una imponente ‘villa’ levantada por Juan Talavera.
De tres plantas y con torreón. Así era la preciosa villa que Juan Talavera -autor de monumentos como el Puente de San Bernardo- levantó en el número 73 de la calle Marqués del Nervión. A día de hoy no queda piedra sobre piedra, después de una demolición absoluta y dolorosa para los amantes de estas casas que convirtieron a Nervión en una hermosa zona de pequeños palacetes.
La casa, que reconocerían por su color amarillo suave, fue realizada por Juan Talavera para Pablo Armero y Castrillo, según consta en el inventario de la obra del arquitecto. Armero era el hermano del Marqués del Nervión, propietario de los terrenos de aquel Nervión por construir de las primeras décadas del siglo XX. Su cargo era el de director gerente de la Inmobiliaria Nervión SA, aquel negocio inmobiliario que se constituyó para convertir Nervión en una zona de casas pintorescas de tintes regionalistas en los albores de nuestro distrito.
La casa, como le pasó a la de Alejandro Collantes, no tenía ningún tipo de protección, por lo que su demolición era imparable a través de la Gerencia de Urbanismo. Mientras, poco a poco perdemos los orígenes de nuestro barrio, la esencia de un pasado regionalista firmado por los grandes arquitectos de la Sevilla de la época. Una lástima.
Miguel Pérez Martín
