Estos días de fiesta son ideales para lanzarse a la calle y disfrutar del cóctel que hace unos meses se convirtió en objeto de culto. El combinado que parece más sencillo, el gintonic, se viste de sofisticación en estos nueve locales de Nervión.
Essencia Xclusive Nervión (San Francisco Javier, 9)
Aquí el gintonic viene revestido de esencias de Grand Marnier. Un toque de licor para contrarrestar la sequedad de la ginebra y de la tónica. Casi que baten la tónica a punto de nieve para que la combinación sea perfecta y se note el sabor especiado. Y servido con sevillanía: con azahar y naranja.
Lemon Premium Club (Luis Montoto, 14)
A golpe de coctelera se hace el gintonic en Luis Montoto. Con mucho hielo para que el combinado sea gélido, los de Nervión le añaden un exclusivo sirope de canela, licor de flor de uva y tónica de pimienta rosa. Y como detalle decorativo, un hermoso ejemplar de lirio flotando en la copa.
Louisiana (Blanco White)
En este local de Blanco White, lo importante es la maceración. Sin añadir aún la tónica, dejan que unos pequeños triángulos de jengibre le den el toque especiado al alcohol. Luego, llega el momento de añadir la tónica, suavemente, como si se sometiera a un proceso de alquimia gourmet.
Probar Vino y Tapas (Diego Angulo Íñiguez, 6)
Porque Sevilla es dulce pero también amarga, en el gintonic de este local le añaden como elemento estrella la naranja amarga que encontramos en nuestras calles al combinado. No solo en forma de cáscara, sino también dentro de un cubo de hielo que retendrá el sabor amargo hasta el último momento. Y para equilibrar, una ramita de canela.
Restaurante Tribeca (Chaves Nogales, 3)
Picante y ácido, así es el gintonic de Tribeca. Para conseguir este festín de sabores junto al amargor de la ginebra, le añaden un poco de cayena y un toque de guindilla. Para equilibrarlo y darle el toque de acidez, un poco de lima al final para culminar un cóctel no apto para clásicos.
Sana Sana Tapas (San Bernardo, 12)
El gintonic de este local en el corazón de San Bernardo lleva varios días de trabajo. La naranja confitada se deja macerar en la ginebra para que el amargor y el dulzor intercambien papeles. La fruta toma también parte del alcohol y, cuando se añade la tónica, el equilibrio de sabores se ha conseguido. La guinda la pone un chorrito de agua de azahar.
Tamgo (Juan Antonio Cavestany esquina Luis Montoto)
Muy frutal es el gintonic que nos ofrece este local, que lleva limón y naranja a partes iguales, añadiendo en el último momento unos toques de piña natural para equilibrar el dulzor.
Tea & Coffee (Ramón y Cajal, 2)
Siendo un lugar a caballo entre la taza y la copa, este local rodeado de campus universitario tenía que ofrecer un gintonic equilibrado entre la cafetería y el pub. Por eso a su ginebra le añaden una infusión, eso sí, de frutas del bosque, lo que le da a la copa un color rosáceo.
Zarandaja (Avenida de la Buhaira, 14)
En este local, en avenida abierta, el gintonic también tiene un toque frutal, pero de algo más exótico. La ginebra empapa los gajos de un mango verde, fruta carnosa y sabrosa. Para dar un toque de huerta andaluza, en lugar de naranja, se decantan por unos gajos de mandarina para terminar la copa.
Puedes probar todos estos cócteles dentro de la I Ruta del Gin Tonic organizada por la marca Rives. Puedes ver más lugares de Sevilla incluidos en la ruta o votar tus favoritos en su página web.
R.N.