El imaginero Antonio Dubé de Luque ha fallecido a los 75 tras una larga enfermedad. Final amargo para el cincuentenario de La Sed.
Antonio Dubé de Luque ha fallecido en el Hospital Virgen del Rocío tras una etapa padeciendo una larga enfermedad. La muerte le ha llegado con 75 años. Tras el fallecimiento de Luis Álvarez Duarte el pasado mes de septiembre, la Hermandad de la Sed pierde en este año de cincuentenario a los dos imagineros que tallaron a sus titulares.
Dubé de Luque le regaló a Nervión algo singular: los ojos azules de Consolación. El imaginero pensó que una dolorosa que va bajo un palio de continuas referencias acuáticas debía tener los ojos del color del mar. Y así fue. Con la Virgen de Consolación arrancó la Hermandad de la Sed en la Parroquia de la Concepción hace ahora 50 años. Al año siguiente, llegaría el crucificado de Álvarez Duarte a Nervión.
La relación de la corporación de Nervión con Dubé de Luque, que tenía su taller en la calle Alfarería, fue más que estrecha. El imaginero era un miembro más de la familia de la Concepción, y fue autor del anteproyecto del paso del Cristo de la Sed -incluidas las cartelas que representan escenas acuáticas y los ángeles- y del diseño del antiguo palio de la Virgen de Consolación, que hoy está en Alcalá de Guadaira. Para ella, diseñó no solo los bordados de bambalinas y techo, sino también la orfebrería.
También tuvo una relación pictórica con otra hermandad de nuestro distrito, la de San Benito. Para la corporación de La Calzada pintó el cartel de la coronación de la Virgen de la Encarnación, de la que este diciembre celebraremos los 25 años. Además, se volcó con la Hermandad de Los Servitas, a la que aportó su particular estilo de elegante sobriedad que vemos cada Sábado Santo.
El cincuentenario de la Hermandad de La Sed acaba así con un inesperado final amargo, tras tener que despedir a sus dos imagineros en menos de dos meses. Una pérdida para la imaginería sevillana y española que ha llenado de tristeza a la ciudad en esta mañana de noviembre.