Llega el verano y a todos nos gusta relajarnos en la playa, pero debemos tener cuidado con los individuos no cualificados que ofrecen sus servicios de masaje en la playa. Aparentemente puede resultar un plan relajante e inocuo para pasar un rato agradable, pero en realidad entraña muchos peligros para la salud que no apreciamos, además de tratarse de una práctica ilegal.
El sitio: una playa no se puede convertir en un spa improvisado ya que las condiciones de higiene son nulas, además difícilmente se puede realizar ninguna técnica de terapia manual correctamente sobre una toalla.
El material: determinadas cremas o aceites al contacto con el sol nos pueden quemar la piel. Daños que pueden ser irreversibles y que nos pueden marcar de por vida en forma de arrugas o cicatrices.
Condiciones higiénicas: además de lo mencionado anteriormente, los masajistas no utilizan ningún tipo de desinfección para las manos de una persona a otra, esto se traduce en que si una persona tiene una infección en la piel y después eres tú el «afortunado” que recibe el masaje, las manos del masajista te pueden transmitir infecciones en la piel como por ejemplo hongos.
Personal no cualificado: al ponernos en sus manos, estamos corriendo el riesgo de empeorar alguna lesión que padezcamos, se han dado casos de mareo y vértigos a raíz de un «tratamiento» de este tipo.
El precio: puede parecer que son baratos ya que por 10 o 15 euros puedes tener tu masajito, pero en realidad apenas son 15 minutos, cuando una sesión con un profesional cualificado sale de media por 30 euros una hora de tratamiento.
Por todo ello, los fisioterapeutas pedimos a la población que tengan cuidado ya que en temas de salud hay que acudir siempre a profesionales cualificados. Ellos te valorarán y te harán un estudio diagnóstico antes de realizar cualquier maniobra. Y si lo que buscas es el relax, recuerda que hay sitios más adecuados en los recibir un masaje. No te la juegues y cuida de tu cuerpo más si cabe en verano. Si tienes alguna duda contacta siempre con un fisioterapeuta.
Esperanza Dorado es fisioterapeuta y puedes encontrarla en @Espe_Dorado