María Auxiliadora salió a la puerta para mirar a los ojos a los vecinos de Nervión en una tarde teñida de rosa y celeste.
La Virgen salesiana vivió ayer su gran día arropada por la comunidad. Tras un 2020 en el que los devotos tuvieron que conformarse con ver una enorme lona colgada sobre la puerta de la iglesia, este 2021 y el avance de la vacunación permitieron que la Virgen pudiera estar más cerca de los vecinos de Nervión.
En la tarde de este 24 de mayo María Auxiliadora fue colocada en el atrio para que todos los que quisieran pudieran encontrarse con ella sin tener que acceder al templo. Con una cola controlada por la gran familia del colegio, la tarde transcurrió con fervor y cautela. Tantos fueron los que quisieron acercarse a ver a María Auxiliadora que tuvieron que ampliar el horario hasta casi las 21.30.
Con la reja cuajada de cintas rosas y celestes, colores de la Virgen salesiana, mayores y pequeños fueron acercándose a la imagen, a cuyos pies se encontraban numerosos ramos de flores, principalmente blancas y rosas, que habían sido regalados a María Auxiliadora para festejar su día. Una estampa nueva que nos deja esta pandemia que ha puesto nuestra vida del revés.