Por primera vez, este verano los robos no han tenido su meca en las viviendas del Casco Histórico. Los asaltantes han elegido Nervión y Triana para realizar sus robos, desafiando a las puertas blindadas y llevándose objetos discretos que no llamen la atención de los demás vecinos. Lo cuenta hoy El Correo de Andalucía.
27 personas han sido detenidas solo durante el mes de agosto por este tipo de delitos. Según las investigaciones, los ladrones optan por robar el mayor número de viviendas posibles de un mismo bloque. Su estrategia es la de llamar al porterillo de forma repetida para asegurarse y hacer un recuento de las viviendas en las que no hay ocupantes. Algunos vecinos de Las Palmeritas y de Nervión Viejo ya nos contaron este modus operandi, por el cual a veces llamaban incluso al atardecer con excusas tan extrañas como la de realizar una encuesta. Otros cogían el porterillo y solo oían palabra ininteligibles en un idioma extranjero, llegando a recibir llamadas por la mañana y por la tarde durante varios días consecutivos.
Normalmente estos ladrones eligen como objetos para sustraer piezas pequeñas, como móviles, dinero o joyas. Piezas que no los delaten en los descansillos si se encuentran con otros vecinos, que no levanten sospechas. Incluso se atreven con las puertas blindadas, con un nuevo método denominado bumping que ya sufrió en julio un vecino de Ciudad Jardín.
El vecino de la avenida Ciudad Jardín, nos cuenta que llegó a casa tras unos días de vacaciones y se encontró su vivienda desvalijada, todas sus pertenencias por el suelo y comprobó que los ladrones habían sustraído dinero y joyas. La policía científica y los cerrajeros que ayudaron a este vecino, le informaron que está siendo un fenómeno bastante común últimamente. Son ladrones especializados en desvalijamientos a viviendas vacías abriendo las puertas de forma limpia y sin dejar huellas de forzado.
El método de robo es muy sencillo, aunque hay que tener algún conocimiento en cerrajería. Utilizan una llave maestra con uno o dos ‘paletones’ y/o un alambre. De este modo alinean los pestillos, incluso si se ha dejado la cerradura cerrada con varias vueltas o si se ha dejado alguna llave puesta por dentro.
En junio ya nos avisaban los vecinos de la Puerta de la Carne de lo que podía ser el verano. Un vecino nos comentaba como se estaban incrementando en esa zona los robos en algunos bloques. Robos que se producían por la noche y sin forzar prácticamente las puertas de los domicilios, lo que hace pensar que son cometidos por alguna banda organizada dedicada a desvalijar viviendas, buscando principalmente joyas y dinero.
Uno de los problemas que se encuentra la Policía con este tipo de sucesos es que los asaltantes suelen ser delincuentes reincidentes, que pasan por la cárcel solo de manera momentánea. A lo que se suma que suelen formar parte de grupos organizados que actúan en diferentes provincias, lo que complica su localización y su captura.
R.N.