Muchos recordarán este edificio por su aparición fundamental en la película ‘Solas’ de Benito Zambrano. Los más mayores recordarán su taberna y hasta hace poco desde su balcón se veía pasar a los titulares de la Hermandad de San Bernardo. El pasado viernes la piqueta empezó a derribar la tercera planta de este edificio que lleva años apuntalado.
El movimiento comenzó con una publicación en Twitter de la asociación Adepa, en el que alertaban del derribo de parte de este inmueble situado en la esquina de la calle Ancha de San Bernardo, justo con Eduardo Dato, justo antes de llegar al Puente. Desde Adepa lo definían como «una joya regionalista de la que, según el Catálogo de San Bernardo, debía conservarse fachada y tipología». Esto se debe a la inclusión de este edificio dentro del entorno protegido de la Fábrica de Artillería, que ofrece una protección para los inmuebles que rodean el monumento.
En las redes sociales había opiniones encontradas. Había espacio para los que opinaban que esto era un atentado contra la historia del arrabal, mientras que otros afirmaban que la fachada se iba a reconstruir igual que estaba pero que el mal estado de la misma obligaba a tirar parte de ella, y otros se cuestionaban si había que conservar por conservar o los criterios debían ser más rigurosos a la hora de conservar un inmueble de estas características.
El historiador del arte Álvaro Iglesias aclaraba en su cuenta en este red social algunos temas interesantes. Por ejemplo, que el edificio no es de por sí regionalista. Ya que el regionalismo acaba en los años de la Guerra Civil y este inmueble se levanta en los años 50, por lo que se consideraría neorregionalista. También explica basándose en la referencia catastral del inmueble los usos que va a tener este edificio cuando acabe la rehabilitación: un ‘ocio hostel’ en la planta baja, viviendas en las plantas primera y segunda, y la tercera planta destinada a otros usos sin concretar.
La respuesta del ayuntamiento
Desde el consistorio la respuesta no se hizo esperar en relación a este inmueble del número 14 de Eduardo Dato. El delegado de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo, Antonio Muñoz, ha negado que la Gerencia de Urbanismo haya autorizado un derribo o demolición alguna en un edificio del barrio de San Bernardo en avanzado estado de deterioro, tal y como ha denunciado en el día de hoy la asociación Adepa.
Así, Urbanismo sí ha concedido una licencia para realizar obras de rehabilitación de este edificio, que se encuentra muy deteriorado, mantiene un expediente abierto por problemas de conservación desde 2003 y se encuentra inscrito en el Registro Municipal de Solares y Edificaciones Ruinosas. Esta licencia cuenta con un informe favorable de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico.
Asimismo, Muñoz ha explicado que la licencia de obras de rehabilitación se ha dado para llevar a cabo la reforma general de la edificación existente. De estas obras resultará un edificio de tres plantas y un ático destinado a 8 viviendas. La Gerencia de Urbanismo no ha concedido ninguna licencia de derribo ni de demolición en este edificio. “No obstante se revisará si la actuación que se está llevando a cabo se ajusta a licencia”, ha indicado el delegado.
Según la empresa que está realizando la obra, están respetando tanto las condiciones que se pusieron desde Urbanismo como las que se fijaron desde la Comisión de Patrimonio.
R.N.