Hay rincones en los que se aprecian de una manera más significativa los descuidos tanto a nivel urbanístico como de mantenimiento. Es el caso de la esquina de la calle Gallinato con Santísimo Cristo de la Salud.
San Bernardo ha sido en las últimas décadas un lugar en el que la ruina florece, solo hay que ver los patios interiores de la Fábrica de Artillería a los que aún no ha llegado el plan de rehabilitación del consistorio. Pero en el caso de la esquina de Gallinato con Santísimo Cristo de la Salud es donde se aprecia de manera más notable la dejadez.
No se trata solo de estos grandes matorrales de malas hierbas que han crecido tanto que parecen que formen parte de la decoración de la zona, y que se abren como ramos desde los bolardos que custodian esta esquina. También es el mal estado del acerado que tiene este rincón del arrabal.
En esta esquina el suelo es distinto, es como si no se hubiera llegado a urbanizar después de una posible obra. Mientras el acerado del resto de la calle tiene la estructura y los materiales tradicionales de acerado en Sevilla, esta zona es como si se hubiera cubierto de forma provisional con hormigón y se hayan olvidado de darle la forma final.
Una esquina en pleno corazón del barrio, justo frente a la Parroquia de San Bernardo y a la Fábrica de Artillería. Un ejemplo de abandono en el que las malas hierbas han crecido con libertad tras la primavera.
R.N.