Apenas habían pasado 36 horas del suceso: la caída de una rama de grandes dimensiones sobre la terraza de un bar de Marqués del Nervión dejaba seis heridos, solo uno de ellos necesitando ser trasladado al hospital para su evaluación completa. Y de repente Parques y Jardines tomaba la calle que da nombre al distrito para cumplir el compromiso del delegado David Guevara: sanear todos aquellos árboles que no se encontraran adecuadamente en esta vía.
Desde primera hora de este lunes, en el tramo de Marqués del Nervión que va de Fernández de Ribera hasta la Plaza de Aparicio Herrero, los operarios de Parques y Jardines no han parado de trabajar. Motosierra en mano y con dos cubas de grandes dimensiones instaladas en una de las plazas de aparcamiento, han ido cortando una tras otra las ramas que creían que podían estar en mal estado o que podían tener riesgo de caída.
En este tramo de la calle, hay alcorques en los que solo queda el tocón del árbol desde hace años.
Hay que destacar, por cierto, que en este tramo de calle ya apenas queda la mitad de los olmos. Tras los que cayeron fruto de las tormentas de la primavera y los que fueron desapareciendo en los últimos años, podemos encontrar al menos cinco alcorques en los que los tocones de los árboles son el único recuerdo de estas especies verdes que daban sombra a esta zona del barrio.
Y de repente, obras en el parque… y una cuba olvidada
Como en un cruce de caminos, también ayer amanecía vallada una de las aceras del Parque Federico García Lorca, justo la que da a la calle del mismo nombre. ¿El motivo? Precisamente unas obras de importancia en el parque. Desde hace meses hemos visto como el peso de unas plantas trepadoras cada vez más fortalecidas por las intensas lluvias y que no se podaron hasta hace tan solo unos días, subían por la verja del parque e iban inclinando el muro que la sustenta hacia el interior de la zona verde.
Este suceso natural ha ido haciendo que poco a poco la verja tire del muro que la sujeta inclinando el enrejado hacia el interior del parque y separando el propio muro del acerado de la calle por la que cada día pasan muchas familias que proceden del propio parque o de los colegios cercanos. Por ello, durante esta semana completa se trabajará en la zona vallada para enderezar la verja y devolverla a su estado vertical. Para ello, se han suprimido las plazas de aparcamiento que se encuentran frente a la ahora solitaria y silenciosa sede de iDental, que sigue cubierta de pancartas de la concentración de la semana pasada por el cierre repentino de la clínica.
En el interior del parque hay otra cuba de más de dos metros de altura y cubierta de grafitis, muy parecida a la instalada esta mañana en Marqués del Nervión. Los niños del parque ya se han acostumbrado a verla allí como un elemento más del parque. Se instaló allí para la poda de los árboles de la zona verde hace más de seis meses y parece que a alguien se le olvidó que había que recogerla. La movieron de sitio, pero ayer por la tarde seguía en el interior del parque aún.
M.P.M.
