La Audiencia de Sevilla ha reconsiderado el caso en el que un atropello acabó con la vida de un policía en 2013 en el cruce de María Auxiliadora con José Laguillo. La conductora iba a ser acusada de una falta de imprudencia, pero ahora lo consideran delito.
Lo que iba a ser una falta de imprudencia leve se ha convertido en un delito de imprudencia grave. Así quiere la Audiencia que se juzgue a la conductora que atropelló a un policía de 27 años que iba en moto por José Laguillo y que perdió la vida en el accidente.
Sucedió en 2013 cuando el joven agente se dirigía a la Macarena junto a otro grupo de compañeros por el carril bus, y el coche lo embistió al hacer el giro desde José Laguillo. Por ello, se abrirá juicio oral contra la conductora.
R.N.