Cuando Leticia Moreno y Marciala Mateos se quedaron en paro, pensaron en lo que les gustaba el mundo de los niños. A pesar de que una era abogada y la otra arqueóloga, decidieron montar Pares o Nones, una juguetería para que los niños levanten la vista de las pantallas para volver a los juegos tradicionales.
«Queríamos ofrecer los juguetes y actividades que a nosotros nos gustan como madres y tías, que refuercen los valores de los niños, que desarrollen sus habilidades y fomenten las actividades que puedan realizar con sus padres», dice Moreno. En Pares o Nones, al inicio de la Avenida de Málaga, venden mucho más que juguetes. Tienen muchas actividades, sobre todo los viernes y los sábados, en una zona de juegos habilitada en la parte trasera de la tienda. Aunque abrieron el pasado noviembre, su iniciativa es todo un éxito: ya cuentan con más de 1.000 socios.
Esos socios tienen ventajas como recibir un boletín mensual con los descuentos y promociones de la tienda, el calendario de actividades y un 5% de descuento en todo lo que compren. Además, hacerse socio es gratuito. El tipo de actividades que se realizan en este local son muy variadas: música, pintura, idiomas… «Aquí no verás maquinitas. Queremos potenciar el juego tradicional y las manualidades, y también las actividades que unan a padres e hijos», dice Moreno. A su tienda no solo llegan vecinos del Prado y de Nervión, sino que hay gente que se desplaza desde el Aljarafe o desde localidades como Coria del Río.
En sus estanterías podemos bucear en la nostalgia entre diabolos, trompos o elásticos. Pero también hay castillos de cartón para jugar a los caballeros, dados con los que se puede construir una historia, pequeños círculos de plástico con los que montar figuras que luego se sellan con el calor de la plancha o lápices para pintar en la bañera que se van fácilmente con el agua. Por supuesto, en la tienda no faltan puzzles, legos, marionetas y muñecos de playmobil.
Para los padres también hay espacio: abuelos y progenitores vienen hasta la tienda para recibir clases de risoterapia o primeros auxilios. Esta misma tarde a las siete tienen un taller para aprender como cuidar la piel de los niños en la playa y protegerla del sol. Una tienda con mucho más que juguetes en pleno corazón del Prado.
Miguel Pérez Martín