La construcción del parque de La Ranilla está siendo «el cuento de nunca acabar» y la eterna cuenta pendiente del Distrito Nervión con sus vecinos. Durante esta semana nos llegaba a través de la red social Twitter esta fotodenuncia de un vecino que se titulaba: «Cada vez más vecinos, cada vez más sordo», y es que los vecinos de Nervión están hartos de pedir por activa y por pasiva que se termine la construcción del parque de La Ranilla.
Como hemos ido reflejando en Nervión al día, La Ranilla es un problema que lleva dos años afectando a muchos vecinos. La promesa de un gran parque que necesita urgentemente la zona, lleva dos años siendo un escampado de matorral y escombros. Las últimas novedades que supimos en la última Junta Municipal de Distrito, no eran nada halagüeñas, ya que la delegada Pía Halcón transmitió a lo allí presentes que la espera continúa:
La delegada de Hacienda aseguró a Halcón que el dinero destinado a las obras del parque, que se decidió en junio pasado que sería un millón y medio de euros, está retenido y que no se ha perdido. La empresa constructora explica que hay una deuda de 360.000 euros del ayuntamiento: 50.000 en intereses, 103.000 por la revisión de precios y 210.000 por los costes indirectos.
La delegada, que sabe que el proyecto no está en su mano, dijo a los vecinos que no puede establecer de nuevo una fecha cierta para la reanudación de las obras. “Este tema me quita el sueño. De verdad, el día más feliz de mi vida después del nacimiento de mis hijos va a ser el día que abramos el parque”, dijo la delegada.
Laura Liñán