Llega agosto y la ciudad parece un páramo. Calles vacías, ruidos que se reducen hasta límites insospechados y que llegan a dejar paso al silencio, parques que parecen abandonados y cierres y más cierres en las tiendas. Te mostramos el Nervión vacío que solo se ve de agosto en agosto.
A pesar de ser uno de los distritos más comerciales y bulliciosos de la ciudad, el tráfico y las aceras abarrotadas desaparecen como un espejismo al llegar agosto. Los bares se vacían, sobre todo los fines de semana, los veladores muestran sus sillas metálicas hirvientes al sol abrasador, los mercados como los de Las Palmeritas o Puerta de la Carne exhiben pasillos vacíos y luces apagadas entre puestos metálicos que parecen olvidados.
Te hemos preparado esta fotogalería con unos cuantos filtros para resaltar este Nervión sin nervionenses, y puedes verla en nuestra página de Facebook en el link de abajo.
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Miguel Pérez Martín
