Investigadores del grupo de investigación Geografía Física Aplicada y Patrimonio de la Universidad de Sevilla han descubierto testimonios paleontológicos de presencia de grandes animales herbívoros, en concreto elefantes e hipopótamos, en la ribera del Guadalquivir durante el Pleistoceno Medio (780.000 a.C.-120.000 a.C.).
Los trabajos desarrollados en el término municipal de La Rinconada (Sevilla) han permitido recuperar restos óseos y dentarios de estos animales, entre ellos dos fragmentos de canino inferior derecho y uno del inferior izquierdo de hipopótamo cuyas dimensiones lo convierten en el mayor encontrado hasta la fecha y que permiten deducir que se trataba de un animal de un tamaño muy superior a los actuales. También se han descubierto una cadera, un fémur y varias vértebras de elefantes, así como otros restos de caballos y uros (variedad salvaje del toro, ya extinguido).
Este grupo de investigadores, dirigidos por el profesor de Geografía Física de la US Rafael Baena, ha llegado a esta conclusión tras desarrollar una intensa labor de investigación sobre el patrimonio arqueológico y paleontológico presente en La Rinconada. Su estudio se ha centrado en el periodo Cuaternario aluvial del río que se extiende por todo el municipio en forma de terrazas.
Los trabajos de campo se han desarrollado en los terrenos de la finca Hacienca La Cabaña, en el entorno de Las Jarillas, donde las labores de extracción de áridos para la construcción han permitido el acceso a números perfiles estratográficos, facilitando de esta forma el estudio de materiales y tipo de ambiente sedimentario del Guadalquivir durante el periodo estudiado.
Además, este grupo de investigadores de la Universidad de Sevilla han descubierto testimonios paleontológicos asociados a la presencia humana, constatada por la numerosa industria de piedra detectada, en el municipio sevillano de La Rinconada en momentos templados y húmedos del Pleistoceno Medio (entre 380.000 y 450.000 años) conviviendo con la fauna.
R.N.