En las redes sociales y entre los aficionados de la Segunda Andaluza han corrido rumores que anunciaban el cierre del Centro Deportivo Antonio Puerta por una trifulca en las gradas en el partido ante el Algabeño. El entrenador del Nervión, Antonio Rueda, desmiente el cierre y nos cuenta lo que ocurrió.
Según Rueda, el partido en general fue tenso y los nervionenses se dejaron llevar por la tensión en algunos momentos. Al entrenador del Nervión lo expulsaron por protestar al terminr la primera parte, por lo que tuvo que estar el resto del partido viendo el encuentro desde la grada. Pero en el graderío Rueda siguió dando indicaciones como si aún estuviera en el banquillo.
Fue entonces cuando un hombre, que Rueda sabe que «no es representativo de la afición de La Algaba», y que según cuentan algunos no es la primera vez que busca el conflicto en un partido, empezó a increparlo. «Comenzó a a amenazarme e insultarme, y la cosa empezó a calentarse. Además, estaba mi padre por allí viendo el partido también, lo que hizo que la situación se volviera más tensa», dice el míster.
«Cuando la afición vio que este hombre se venía para mí, un aficionado del Nervión, que es muy corpulento y que lo conocemos de siempre, vino a poner orden. Pero claro, en ello se tardaron unos ocho o nueve minutos», dice Rueda. Fue entonces cuando el árbitro reparó en lo que sucedía en la grada y, desde su sitio, lo contempló como una trifulca entre aficionados.
Esa sería, según aparece en el informe, la segunda falta leve por alteración del orden en lo que va de liga. Esa primera falta se había producido al inicio de ese mismo partido, cuando un aficionado algo ebrio había saltado sin pensar en las consecuencias al terreno de juego. Pero, como cuenta Rueda, para que se produjera un cierre del campo -para una jornada- tendría que haber tres faltas leves. Así, aún queda otra falta para que el Antonio Puerta sea clausurado. Lo que sí se llevarán ambos equipos es una multa: 100 euros para el Algabeño y 90 para el Nervión.
Miguel Pérez Martín
