Criado futbolísticamente en su Estepa natal, Antonio Rueda es ya un experimentado entrenador del fútbol provincial sevillano, después de entrenar a equipos como el Abre, Séneca, Marinaleda B o el propio Estepa, con el que militó en Preferente después de empezar su carrera como técnico en el juvenil del club estepeño.
Ahora, en la temporada 2013/2014 estará al frente del sénior del AD Nervión después de que el conjunto nervionense consumara su descenso a Preferente el pasado curso. Por aquel entonces, ya estaba en su banquillo nuestro protagonista de hoy, un banco al que llegó nueve jornadas antes de que finalizara el curso y con un equipo casi defenestrado.
– Un inicio bastante convulso en su nueva etapa al frente del equipo blanquiazul…
– Sin duda. Cuando cogí el equipo estábamos a 12 puntos de la salvación faltando 9 partidos, es decir, 27 puntos en juego. No fue la mejor situación, pero hay que ser realista y si el equipo va en mitad de la tabla o en los primeros puestos no te llaman, no te dan la oportunidad de entrenar aquí. Hubiese estado mejor el haber estado más cerca de la salvación, pero, aunque lo intentamos hasta última hora, no se pudo.
– Después de coger al equipo la pasada temporada casi descendido, ¿cómo es trabajar desde el inicio con el grupo?
– Cambia totalmente. Hay una mayor responsabilidad. El año pasado, todo lo que hiciera sería bueno; este año todo lo que haga, bueno, mejor dicho, no haga, será malo. Como no entre la pelotita…
– ¿Tanto se nota la presión?
– Precisamente este año, el club tiene un duro escoyo en el terreno económico, ya que con la asignación del mantenimiento del campo se va todo el presupuesto. No hay dinero para fichar. Si ya de por sí el club nunca paga por fichajes, ahora menos todavía. Y hacer un equipo a coste cero es un riesgo. O pegas el pelotazo con los chavales que vienen del juvenil y aciertas con los dos o tres fichajes que hagas a coste cero, o si no el máximo objetivo es salvarte.
– Al respecto, ¿qué papel tendrán los jugadores del juvenil en el equipo sénior?
– Ya el año pasado tuvieron un papel importante y protagonista, porque cuando yo llegué sólo quedaban 14 jugadores en la plantilla y muchos de ellos eran juveniles. Yo nunca miro el DNI de los futbolistas y si son mejores que los sénior, juegan. Los que hay ahora mismo en la plantilla, más cuatro o cinco veteranos, son los que me ayudaron el año pasado a sacar esto adelante. Esto contento por poder contar con ellos este año.
– ¿Serán ellos un poco la identidad del equipo para esta temporada?
– Eso intentamos. Aunque haya cuatro o cinco veteranos, la mayoría será juventud.
– ¿Cambiará mucho el equipo del año pasado respecto al que entrenará en Preferente?
– Bueno yo no estuve en el principio del proyecto y la plantilla que yo cogí estaba ya con lo justo. Con los jugadores con los que yo conté son con los que le dolía de verdad el club, los que lo sentían y sé que con ellos puedo contar.
– Aunque una baja considerable de esos que se quedaron puede ser Roberto…
– Está claro, será una baja sensible, pero siendo el pichichi de Primera Andaluza te llaman desde 20.000 sitios. El año pasado recibió llamadas y quiso quedarse con nosotros, algo que le honra; pero ya este año era imposible mantenerlo. Y lo entendemos, pero hay sustituto ya y para delante. Nadie es imprescindible. Ni Roberto ni yo ni nadie.
– Me dice que la delantera está bien cubierta, ¿hay alguna posición que todavía sea primordial reforzarla?
– Quizá el punto más flojo sean las bandas, las ofensivas. Los laterales los tenemos bien cubiertos, pero de extremos andamos escasos. Por ambos lados. Se nos está ofreciendo mucha gente, estamos viendo, nos quedamos con algunos, descartamos otros, pero aún no están definidas. Ahora mismo para la forma de juego que yo quiero no las tenemos. Seguiremos buscando y, si no los encontramos, nos adaptaremos a lo que haya en el equipo.
– ¿Cuál será la filosofía de juego de este equipo?
– A mí me gusta tener la pelota, pero cuando tienes jugadores para tenerla y cuando el partido te lo permita. Yo lo que quiero es ganar, y si hay que ganar al contraataque pues nada, a correr y punto.
– El año pasado el equipo pecó de irregularidad, ¿es esta circunstancia clave para cuajar una buena temporada?
– Por supuesto, y más en una categoría tan difícil como este año será la Preferente. Si te duermes, te lleva la corriente. Con equipos como Los Palacios, Morón, Brenes, Paradas, Triana, Puebla… dormirte puede hacer que se te haga un mundo la temporada. Además somos 20 equipos, por lo que van a ser 38 jornadas.
– Temporada larga. El físico será crucial.
– En este aspecto tenemos a Carlos Barrio (preparador físico) que lo he conocido este año. Está haciendo un trabajo espectacular y confío mucho en él porque es joven. Es la primera vez que está con un equipo sénior y se quedó sorprendido cuando le llamamos, pero como te he dicho antes no miramos el DNI para firmar a nadie, ni a futbolistas ni a cuerpo técnico. Está trabajando de forma espectacular, al igual que el resto de componentes, Pablo Castaño (segundo entrenador) y Dani Silva (delegado), y tenemos un reto que es mantener al equipo 100% todo el año, algo que antes era impensable y que ahora nos lo hemos propuesto.
– ¿Servirá el descenso de este año pasado para pulir los errores cometidos y saber anticiparse a ellos?
– De todo se aprende. De lo bueno y de lo malo. El año pasado había algunos déficit que estamos intentando corregir, porque el más mínimo detalle hay que cuidarlo.
– ¿Cómo ve a sus jugadores después de dos semanas de entrenamiento?
– Con muchas ganas, tanto en los amistosos como en los entrenamientos hay mucha intensidad y todos están demostrando que quieren pertenecer al Nervión.
– Hay ganas por ponérselo difícil.
– Bendito problema. Soy de la opinión de cuanto más gente buena tenga, mejor. Aunque sea más difícil elegir y también más difícil equivocarse, lo cierto es que esa circunstancia te da un plus.
– Aunque nadie quiere hablar de objetivos a principio de temporada, menos aún cuando resta un mes para el inicio, ¿sueña con un Nervión luchando por los primeros puestos?
– Yo lo que tengo ganas es de empezar y cuando empiece la temporada el objetivo será el de salvarnos. Si yo tuviera el presupuesto de otros equipos de la categoría podría ponerme otras metas más altas, pero de momento hay que partir desde cero. Que la liga se plantea para que se pueda luchar por el ascenso, pues se luchará, pero todo eso ha de llegar, no nos lo podemos plantear desde un primer momento. A ganas no nos va a vencer nadie, a presupuesto, todos.
– ¿En qué se nota esa diferencia económica?
– Básicamente que no le puedes ofrecer unas ganancias al jugador. Nosotros lo que ofrecemos es venir al tercer club más importante de Sevilla, pero si hay jugadores que prefieren los 300 o 400 euros que ganan en otros clubes no puedes hacer nada contra eso.
– ¿Qué espera en líneas generales de la temporada?
– En líneas generales me marco entrenar hoy y ganar el primer partido. Estoy deseando que salga el calendario para saber contra quien empezamos. Ese es nuestro objetivo, y cuando ganemos al primer equipo, pensar en el segundo.
Alfonso González